Maleabilidad
Cuando pensamos en utilizar un material pensamos en: dureza, fragilidad, resistencia, impermeabilidad, elasticidad, conducción del calor, etc. O sea pensamos si las propiedades del mismo soportan las solicitudes del trabajo al que deberán ser aplicados.
La maleabilidad es una propiedad que similarmente como la ductilidad son propiedades que presentan los cuerpos físicos. A diferencia de la ductilidad, la maleabilidad se refiere a la formación de filamentos, la maleabilidad nos permite la conformación de finas láminas que conservan su integridad ya que no se rompen y no existe ningún método que permita cuantificar estas láminas.
Uno de los elementos maleables por excelencia es el oro, pudiendo llegar a láminas de un espesor igual a los diez milésimos de milímetro. Otro material que se presenta como altamente maleable es el aluminio y gracias a esto que se vio la popularización de su uso en cocina como envoltorio de alimentos y en el empaque industrial, así como en el forrado interno de preservación que poseen las cajas de líquidos.
En muchos casos, la maleabilidad de una sustancia metálica aumenta con la temperatura. Por eso es que los metales son trabajados más fácilmente cuando son expuestos al calor.
Pensando en propiedades de los materiales, estas pueden ser:
1 – Propiedades Físicas
2 – Propiedades Químicas
Propiedades Físicas
Es el grupo de propiedades que determinan el comportamiento del material en el momento del proceso de fabricación como también durante su utilización posterior.
Propiedades Mecánicas
Conjunto de propiedades de gran importancia en la industria mecánica. Estas propiedades son aquellas que surgen cuando el material está sujeto a esfuerzos de la naturaleza mecánica. Lo que es evaluados es la capacidad que el material tiene para transmitir o resistir a los esfuerzos que le son aplicados (tomando en cuenta el proceso de fabricación y posterior utilidad).
Resistencia Mecánica: Es la resistencia a la acción de determinados tipos de esfuerzos, como la tracción y la compresión
Elasticidad: Es la capacidad que un material debe tener de deformarse, cuando es sometido a un esfuerzo y de retornar a su forma original cuando el esfuerzo termina. Ejemplo: goma, acero para la fabricación de cojinetes.
Plasticidad: Es la capacidad que un material posee cuando es sometido a un esfuerzo en deformarse y mantener esta deformación cuando el esfuerzo desaparece.
La plasticidad puede presentarse en el material como maleabilidad y ductibilidad.
Maleabilidad: Es la propiedad que un material, por ejemplo el acero presenta, puede ser laminado, estampado, forjado, torcido y alisado.
Ductibilidad: Es el opuesto de fragilidad, son materiales que al sufrir la acción de una fuerza, se deforman plásticamente y se rompen.
Ejemplo: Procesos que necesitan conformación mecánica, como por ejemplo en el prensado para la fabricación de partes de carrocerías de vehículos, en la laminación, para la fabricación de chapas, en las extrusión y para la fabricación de tubos.
Dureza: Es la resistencia del material a la penetración, deformación plástica permanente, al desgaste mecánico. En general materiales duros son también frágiles. Cuanto mayor la dureza mayor la resistencia al desgaste.
Fragilidad: Es la baja resistencia a los choques. Podemos decir que son materiales duros, que tienden a romperse cuando sufren choques o roturas. Por ejemplo el vidrio.
Densidad: Es la medida de la cantidad de materia (masa) que un material ocupa por volumen. Por ejemplo tomamos 1cm3 de corcho, 1cm3 de agua y 1cm3 de plomo.
Se verifica que cantidades diferentes de materia en un mismo volumen poseen masas diferentes
– Tenacidad: Es la resistencia a choques, golpes, vibraciones, impactos e impactos