El espectro electromagnético
En el post de hoy nos vamos a centrar en el estudio del espectro electromagnético, en que consiste y cuales son los rayos que lo forman.
Definición: Llamamos espectro electromagnético al conjunto formado por ondas, desde las que tienen mayor longitud (por ejemplo, las ondas de radio o las ondas que pertenecen a sonidos que pueden ser percibidos por el oído del ser humano) hasta las ondas de menor longitud (por ejemplo, los rayos Gamma o los rayos cósmicos).
Las características fundamentales para estudiar y describir los diferentes tipos de ondas son, a parte de la longitud de onda; la energía y la frecuencia.
Observación: Debemos tener en cuenta a cuanta mayor longitud de onda hay menor frecuencia y al contrario, cuanto menor longitud de onda mayor frecuencia.
A partir de la observación anterior, también podemos dar una definición análoga para el espectro electromagnético haciendo referencia a la frecuencia de las ondas.
Definición: Cuando hacemos referencia a un objeto, llamamos espectro electromagnético a la radiación electromagnética que puede absorber o emitir dicha sustancia. Para poder observar los espectros se utilizan espectroscopios, que además nos permiten medir la longitud de onda, así como la frecuencia y la energía (o intensidad de la radiación).
Las ondas que forman el espectro electromagnético y que podemos observar en la siguiente imagen son (describiéndoles desde los que tienen menor longitud de onda a los de mayor):
– Rayos Gamma: Son las ondas que tienen la longitud de onda más corta, y por tanto, la frecuencia más alta. Son las ondas más penetrantes conocidas, además poseen alta energía que les permite viajar a distancias muy largas por medio del aire.
– Rayos X: Éstos se encuentran situados entre los rayos Gamma y los rayos ultravioleta, por tanto tienen más energía que los ultravioletas. Se usan en una gran multitud de aplicaciones industriales y científicas. Destaca, sobre todo, su empleo en la medicina donde son muy importantes el uso de la radiografías. A pesar de todo, pueden ser muy peligrosos, ya que consisten en una forma de radiación ionizante que emiten los electrones que se encuentran en el exterior del núcleo.
– Rayos ultravioletas (UV): Estas ondas se encuentran en la franja de frecuencia que se encuentra situada entre los 7,5×10^14 Hz y 3,0×10^16 Hz. Los tipos más conocidos son los rayos UV-A (ultravioletas-A) y los rayos UV-B (ultravioletas-B). Muchos de los rayos del Sol que recibe la Tierra, y también algunos que proporcionan determinadas lámparas de rayos; son del tipo UV-A, por lo que es peligroso exponerte a ellos en exceso ya que pueden aparecer cáncer de piel. Aunque también es verdad, que si la exposición a ellos es de forma moderada, favorecen la creación de vitamina D. Pero como ya sabemos, la capa de ozono nos ayuda a protegernos de estos rayos actuando como un filtro natural.
-Luz visible ( o espectro visible): Es la parte del espectro electromagnético que el ojo del ser humano es capaz de detectar. Abarca todos los colores: del azul a 400 nm al rojo a 700 nm.
-Rayos infrarrojos (IR) ( o radiación térmica): Los infrarrojos se encuentran en la franja de frecuencia que se encuentra situada entre los 3,0×10^11 Hz hasta los 3,8×10^14Hz. La gran mayoría de los rayos infrarrojos que recibimos son procedentes del Sol, aunque cualquier molécula que tenga una temperatura superior a 0ºKelvin emite rayos infrarrojos. Los rayos infrarrojos son de gran utilidad para la meteorología, ya que a partir de una foto de la Tierra desde un satélite utilizando rayos infrarrojos, se puede conocer la temperatura en cada zona de la Tierra, dependiendo de los diferentes colores que aparecen.
– Ondas radioeléctricas: Por último, las ondas radioeléctricas son las de mayor longitud de onda. Se usan principalmente para la televisión, teléfonos móviles y la radio.