Conceptos de Electromagnetismo
La existencia de fuerzas naturales y el magnetismo son una fuente eléctrica que se observó en contextos independientes históricos, pero sólo en la primera mitad del siglo XIX un grupo de investigadores logró en la unificación de los dos campos de estudio y sentar las bases de una nueva concepción de la estructura física de los cuerpos.
En el siglo XVIII Charles-Augustin de Coulomb y Cavendish Henry había determinado las leyes empíricas que rigen el comportamiento de las sustancias y acusado de imanes eléctricos. Mientras que la similitud entre las características de los dos fenómenos indican una posible relación entre ellos, sólo en 1820 se obtuvo la prueba experimental de esta relación, cuando el danés Hans Christian Oersted, al acercarse a un compás de un cable que conecta los dos polos de una batería eléctrica, descubrió que la aguja magnética de la brújula no apuntan al norte, girando hacia una dirección perpendicular al alambre.
Poco después, André-Marie Ampère demostró que dos corrientes eléctricas ejercen influencia mutua, cuando circula a través de los cables cerca unos de otros. Sin embargo, hasta la publicación a lo largo del siglo XIX, las obras de Inglés Michael Faraday y James Clerk Maxwell escocés, el electromagnetismo no era – ni siquiera empezado a ser – considerarse como una rama de la física verdadera.
Variables y magnitudes
Los fenómenos electromagnéticos son producidos por cargas eléctricas en movimiento. La carga eléctrica y la masa es una cualidad intrínseca de la materia y tiene la particularidad de existir en dos variedades, convencionalmente llamados positivos y negativos. La unidad elemental de carga es el electrón, partícula atómica con un signo negativo, aunque su magnitud no da lugar a la entidad suficiente para calcular macroscópico normal. Como unidad de carga habitual se utiliza a continuación, el culombio, el valor de la carga de un electrón es equivalente a 1,60 x 10-19 culombios.
Dos cargas eléctricas de igual signo se repelen entre sí, y cuando de atraer signos opuestos. La fuerza de estas interacciones es directamente proporcional a su volumen de carga e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que los separa. Para explicar la existencia de estas fuerzas adoptó el concepto de campo eléctrico creado en torno a una carga, de modo que la fuerza eléctrica que actúan sobre otra carga a distancia desde el primer producto corresponde a la cantidad de la carga de primera magnitud llamada de una intensidad campo eléctrico. El campo de energía que transmite la unidad de carga se denomina potencial eléctrico y se mide en voltios.
Un núcleo magnético variable es la inducción magnética, estrechamente relacionado con la intensidad de campo magnético. La inducción es la fuerza magnética ejercida sobre un cuerpo por unidad de carga eléctrica y la velocidad. La unidad de inducción magnética es el Tesla, equivalente a un weber por metro cuadrado, el weber es una medida de flujo magnético (magnitud que refleja la densidad de los campos magnéticos). Tanto la intensidad de campo eléctrico y magnético como el vector de inducción magnética tienen un carácter y, por lo tanto, para describir correctamente se debe establecer para cada uno, su magnitud, dirección y sentido.
Aplicaciones del Electromagnetismo
El electromagnetismo ha revolucionado la forma en que vivimos y trabajamos. Sus aplicaciones son innumerables y se encuentran en casi todos los aspectos de nuestra vida diaria. Desde la generación de electricidad hasta la transmisión de información a través de la internet, el electromagnetismo juega un papel crucial.
Los motores eléctricos, que se basan en el principio del electromagnetismo, son una parte esencial de muchos dispositivos que usamos diariamente, como los electrodomésticos, los automóviles y las herramientas eléctricas. Los transformadores eléctricos, que permiten la transmisión eficiente de la electricidad a largas distancias, también son una aplicación importante del electromagnetismo.
En el campo de las telecomunicaciones, el electromagnetismo es la base de las tecnologías de radio y televisión. Las ondas electromagnéticas se utilizan para transmitir información a través de largas distancias. Además, las tecnologías inalámbricas, como el Wi-Fi y el Bluetooth, también se basan en el electromagnetismo.
En medicina, el electromagnetismo ha permitido el desarrollo de técnicas de diagnóstico avanzadas, como la resonancia magnética (MRI), que utiliza campos magnéticos y ondas de radio para crear imágenes detalladas del cuerpo humano.
En resumen, el electromagnetismo es una de las fuerzas fundamentales de la naturaleza que ha permitido el desarrollo de la sociedad moderna. Su estudio y comprensión son esenciales para el avance de la ciencia y la tecnología.