Calentamiento térmico solar
Al borde de la crisis, sobretasas y amenaza de falta de energía, muchos brasileños han buscado soluciones de emergencia para disminuir el consumo eléctrico y/o para afrontar los ‘apagones’. En ese contexto la utilización de energías renovables ha sido muchísimo cuestionada y visualizada por el consumidor final. Para el usuario urbano, la opción más viable es, sin lugar a dudas, la energía solar.
Las aplicaciones de la energía solar pueden dividirse en dos modalidades principales; Las térmicas y las fotovoltaicas. En nivel de tecnología y escalonamiento de producción actuales, podemos afirmar que, en el área urbana, las aplicaciones térmicas pueden llegar a representar un gran ahorro de energía eléctrica para el consumidor final, siendo que la fotovoltaica puede ayudar a huir del apagón, actuando como fuente de energía eléctrica de emergencia, concurriendo así con los generadores portátiles.
Las aplicaciones térmicas son aquellas donde la luz solar es transformada directamente en calor por la absorción de superficies oscuras. El ejemplo más práctico es del calentador solar de agua. En él, el agua es calentada en los colectores solares y almacenada en depósitos térmicos (Boiler).
Su utilización sustituye canillas y duchas eléctricas, representando un ahorro de hasta el 35% en el consumo eléctrico de una residencia. Su uso es, en cualquier época, bastante ventajoso en casas, hoteles, industrias y edificios residenciales. Su proceso de fabricación es bastante simplificado utilizando materiales bastante disponibles como el vidrio, cobre, aluminio, acero, etc. En la industria brasileña el sector produce reconocidamente sistemas de excelente calidad y crece a pasos largos.
Para casas, el sistema puede ser pago en dos o tres años, su vida útil es de más de veinte años. El costo de mantenimiento es muy bajo pues no requiere muchas intervenciones. Es importante decir que el sistema funciona aún en días nublados y los depósitos pueden almacenar agua caliente durante más de tres días. Para varios días de lluvia, posee calentamiento eléctrico complementar para garantizar el conforto. El conforto térmico, como en cualquier sistema de calentamiento central, es muy superior al conforto de la ducha eléctrica.
Eso se da por la capacidad de flujo, muchísimo superior, y la posibilidad de obtenerse variadas combinaciones entre temperaturas y flujos, aún manteniendo fijo o valor de una de ellas. Más que un paliativo a la crisis actual, el calentamiento solar es una solución definitiva en conforto y economía.
Energía solar fotovoltaica
Las aplicaciones fotovoltaicas se basan en la propiedad electroquímica que algunos materiales poseen de transformar luz en electricidad – energía noble e indispensable para el uso de equipos electrónicos.
Los paneles fotovoltaicos presentan un costo superior a los colectores térmicos solares de potencia equivalente, más allá de requerir mayor área. Sistemas autónomos piden almacenamiento – en general baterías – eso hace que el sistema sea más caro, principalmente por el costo del mantenimiento.
La energía solar fotovoltaica ya es posible en diversas aplicaciones pero, como el sistema autónomo para uso doméstico no logra competir con el precio de la energía eléctrica común vía rede pública, que se da principalmente por la alta inversión inicial y alto costo de mantenimiento del sistema de almacenaje. Pero, es importante recordar que, en ese caso, el usuario dejará de ser un simple consumidor y pasa a ser un auto productor de energía eléctrica. Lo que es una situación bastante diferenciada.
Actualmente, la energía fotovoltaica puede ser una buenísima solución para huir de los apagones por intermedio de sistemas de suministro eléctrico de emergencia, donde compite con los generadores portátiles. Las principales ventajas son:
- No utilizar combustible.
- Requerir poco mantenimiento
- Presentar funcionamiento limpio, sin vibración, ruidos, etc.
- Operan continuamente, no necesitan de procedimientos de activación.
- Vida útil de los paneles elevada – aproximadamente 25 anos.
Hay un alerta: generadores portátiles con motores de combustión interna no pueden ser utilizados en ambientes cerrados, como el interior de casas y departamentos, pues si eso pasa es letal por la emisión de CO.